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Se amplía la brecha de renta de los hogares con Europa…

Siendo el crecimiento nominal de la economía española durante el presente siglo uno de los más elevados de los países de nuestro entorno, lo cierto es que dicho crecimiento diferencial es atribuible casi en su totalidad a la demografía. Concretamente a ese intenso crecimiento de la población registrado en nuestro país desde inicio de siglo impulsado sobre todo por la extraordinaria ola migratoria, de tal manera que, en términos de renta bruta disponible por persona (RBD per cápita), se produce un práctico estancamiento de la misma en términos reales.

Efectivamente, España sólo ha podido mantener su nivel de RBD per cápita en términos reales durante lo que llevamos de siglo, definiendo una referencia (17.236 euros en 2022) significativamente alejada del nivel medio de la zona euro (23.648 euros) con quie n ha aumentado la brecha, como también lo ha hecho con países como Alemania y Francia, que ya ostentaban una renta muy superior. De los grandes países, sólo Italia (21.606 euros en 2022) ha te nido un comportamiento manifiestamente peor que el de España.

En términos no ya per cápita, sino de unidad familiar, la evolución que ponen de manifiesto las sucesivas olas de la EFF es todavía más adversa, a lo que no es ajeno la reducción del tamaño medio de los hogares españoles que ha tenido lugar. Ni en media (casi 37.000 euros en 2020), ni en ninguno de los percentiles de la distribución (mediana de 28.500 euros), se habría recuperado el nivel de renta disponible por hogar en términos reales de inicio del siglo.