No es posible entender, y mucho menos tratar de anticipar, el comportamiento financiero y no financiero de los hogares en las décadas venideras, sin atender al factor demográfico. En particular los efectos que ha tenido y seguirá teniendo la extraordinaria reducción de la natalidad, el aumento de la esperanza de vida o los intensos flujos migratorios netos positivos hacia nuestro país que se han intensificado en lo que va de siglo, y que con alta probabilidad continuarán durante las próximas décadas.

 

Al mismo tiempo, las perspectivas demográficas en cuanto a número, tipología y localización de los nuevos hogares deberían constituir el marco sobre el que se tomasen las decisiones relativas a la promoción de vivienda, considerando también sus características y cuál puede ser su régimen de tenencia.

 

La vivienda, desde muy diferentes perspectivas, constituye una pieza angular que impacta en la dinámica de los hogares. El acceso a la misma, en alquiler o en propiedad, está intrínsecamente unido a la emancipación y formación de nuevos hogares, afectando también a la concentración de población en determinadas zonas urbanas.

El objetivo de este segundo estudio de la Fundación Afi-Emilio Ontiveros correspondiente a 2024 es profundizar en el análisis de dos factores claves, la demografía y la vivienda, que impactan en el comportamiento de los hogares españoles, incorporando también, donde es posible, un enfoque prospectivo. Las implicaciones de la dinámica de dichos factores en la ampliación de la brecha intergeneracional de riqueza en estas últimas décadas, que ya poníamos de manifiesto en el primer estudio de la Fundación , se complementa en este con una perspectiva analítica intra-generacional que no es menos relevante.

 

A partir de estas piezas clave como son la demografía y la vivienda, junto con sus implicaciones en términos de desigualdad de riqueza se desarrollan a continuación las principales conclusiones del estudio, que enumeramos a continuación: